Cambiar cómo aprendemos para revelar el futuro de la educación

Puede ser que la revelación más importante de la comunidad educativa en las últimas décadas és que muchos de los caminos tradicionales de la enseñanza se han construido sofocando el pensamiento crítico. Exámenes a todo o nada en base al aprendizaje de memoria que han definidido a las generaciones previas en nuestras aulas se han demostrado más bien inhibidores de la creativididad que no impulsores de nuevas formas de pensar. Lo que está en juego en la educación hoy en día no es sólo el bienestar de nuestros alumnos:

• Estudios en los Estados Unidos han demostrado que en 2020 el 96% de los puestos de trabajo requerirán habilidades en pensamiento crítico, y un 70% requerirán conocimientos matemáticos e informáticos.
• No impulsar el interés en STEM (Science, Technology, Engineering and Mathematics) puede tener consecuencias poco positivas en el futuro desarrollo de la sociedad, pues son las habilidades que lideraran tanto el mercado de trabajo como el crecimiento económico global.
• Impulsando el pensamiento crítico y la creatividad en los jóvenes se puede ir más allá en la alfabetización mundial y en las materias educativas que pueden reprimir problemas de pobreza y división socioeconómica.
• Formando a alumnos para ser ágiles pensadores les va a proporcionar el conocimiento necesario para encarar los desafíos de un mundo que cambia rápidamente.

Cuando hemos entendido las limitaciones del aprendizaje de arriba a abajo, encontramos que aprender haciendo puede darle la vuelta al concepto de la educación. Para LEGO Education esto ha significado transformar lo que a los ojos de un niño parece un juguete en una herramienta educativa cuando se pone en sus manos. Para LEGO Education ROBOTIX el reto es introducir las soluciones de LEGO Education en el aula y tras ello dar fuerza a la experiencia en el aula en una manera que pueda influenciar al máximo al alumnado y en un sentido positivo. Actualmente, es sabido que el aprendizaje con las manos y sin límites pone a los alumnos en una posición en la que se pueden sentir motivados en pensar por sí solos, y desarrollar nuevas soluciones con las que afrontar los problemas y resolverlos. Fomentar el espíritu emprendedor y la enseñanza flexible con la experimentación lleba a un nuevo campo de habilidades que pueden ser totalmente transversales y ser necesarias en cualquier tipo de trabajo, disciplina o proyecto que un joven pueda encontrarse en cualquier punto de su camino.